Dando servicios a los comercios… y recibiéndolos
Ya se trate de un sistema de seguridad o un sistema de acceso, el dueño de un comercio no puede permitirse inactividad. Por ello están empezando a aparecer servicios pensados para que puertas, cerraduras, muelles de carga, etc. se abran y cierren cuando deben.
Los dueños de tiendas caminan constantemente por la cuerda floja. Por un lado deben facilitar a sus clientes la entrada a sus tiendas, pero también deben tener el suficiente control del acceso para asegurarse de que sus productos no salgan de la tienda sin que se haya pagado por ellos.
“Lo peor que le puede pasar a un comercio es no poder abrir esas puertas, por muchas razones”, afirma Brendan Alexander, director de prevención de pérdidas de Best Buy/Future Shop Canada. La confianza del cliente se basa en que las tiendas estén abiertas cuando deben estarlo, pero sus dueños tampoco quieren que los empleados se queden fuera sin poder entrar en la tienda.
A medida que los grandes comercios van adoptando cierres electrónicos para sus puertas, es cada vez más importante asegurarse de que el sistema no va a fallar. Y aunque las cerraduras electrónicas son más caras de instalar que las mecánicas, la mayoría de los comerciantes las consideran un ahorro de dinero a largo plazo. Como explica Alexander, “si una llave se pierde o es robada, no tenemos que cambiar todas las cerraduras”, lo cual sería muy caro.
Pero, ¿qué pasa cuando se va la luz? “Casi todos los sistemas están equipados con sistemas de apoyo de alimentación que permiten abrir las puertas cuando hay fallos”, dice Geert De Smet, director de marketing y ventas del departamento de Soluciones de Puertas para Peatones de Besam (Bélgica). “Esto también se puede hacer de forma mecánica; depende de la zona. Cada país europeo tiene sus propias normas al respecto. Bélgica exige sistemas mecánicos, dice De Smet, mientras que en Suecia basta con los sistemas de apoyo de alimentación. Los comercios del Este de Asia también suelen depender generalmente de un apoyo de alimentación”, añade.
Steven Lewis, director adjunto de producto de Software House, que pertenece a Tyco Security Products, establece una distinción entre las soluciones “fail-safe” y “fail-secure”. Si el sistema no recibe alimentación, una puerta equipada con un dispositivo “fail-safe” se mantendrá abierta, mientras que una puerta “fail-secure” seguirá cerrada.
“Es posible que muchos comerciantes no quieran soluciones ‘fail-safe’, temiendo que pueda ocurrir algo por la noche”, dice Lewis. “La mayoría preferirá una solución del tipo ‘fail-secure’.”
Una herramienta que utilizan los comerciantes para asegurarse de que las puertas siguen funcionando como es debido es el mensaje de “comprobación de salud”. “El servidor está comprobando constantemente que esos dispositivos están ahí”, dice Lewis. “De ese modo sabe que los controladores están funcionando, ya se trate de un control anti-intrusión, un servidor de vídeo o los propios paneles de control de acceso. Siempre está enviando una señal que dice ‘Hola, ¿sigues ahí?’, a lo que los controladores responden ‘Sí, seguimos aquí’. Y si en algún momento esto deja de ocurrir, el servidor avisa al operador del sistema de que alguno de los dispositivos no ha respondido.”
“Al mismo tiempo, el controlador siempre está en contacto con el servidor”, añade Lewis.
“El sistema siempre se comunica en ambas direcciones.” Una serie de no-respuestas en cualquiera de las dos direcciones indica un problema de comunicación que se puede subsanar inmediatamente.
Alexander, de Best Buy, afirma que todos los circuitos de cámaras, así como los sistemas de seguridad y antiincendios de su empresa, cuentan con monitores “de salud” que emiten mensajes de “comprobación de salud”. “La tecnología nos avisa: tenéis una cámara que no funciona, uno de los puntos del sistema de alarma ha fallado, vuestro sistema antiincendios presenta problemas, etc.”
Si bien los comerciantes se esfuerzan por que los clientes puedan entrar siempre en sus tiendas, también tienen que hacer frente al problema de las pérdidas por robos: todos los productos que salen de la tienda sin que se haya pagado por ellos.
Muchas de esas mismas compañías que ofrecen sistemas de acceso también ofrecen productos que ayudan a combatir las pérdidas por robos, y a menudo vienen integrados en las mismas soluciones. En una solución de Tyco, por ejemplo, unas cámaras situadas estratégicamente capturan imágenes de alta calidad de gran poder disuasorio. Un encargado de varias tiendas puede controlar todas ellas a distancia desde cualquier lugar usando un sistema de control de acceso y vídeo integrado. Además, el acceso a zonas delicadas (por ejemplo, las cámaras de seguridad donde se guarda el dinero) se puede programar para que dos personas deban presentar sus credenciales simultáneamente si se quiere obtener dicho acceso.